sábado, 9 de noviembre de 2013

DOMINGO XXXI DEL TIEMPO ORDINARIO

HOY HA LLEGADO LA SALVACIÓN A CASA



PRIMERA LECTURA del libro de la sabiduría 11,22-12,2
Esta lectura nos muestra al verdadero Dios: Padre misericordioso que nos creó con amor, nos guía con amor y nos acompaña con amor, pero también un Dios justo que nos corrige como un padre, nos hace reconocer nuestros errores y faltas; por eso como católicos debemos entablar un diálogo con ese Padre de amor que se da desde el corazón, teniendo la capacidad de ser amado y amar como ama Dios.



SALMO 1441-2. 8-9. 10-11.13dc-14


SEGUNDA LECTURA de la segunda carta de San Pablo a los tesalonicenses 1,11-2,2


En esta lectura Pablo nos invita a hacer una oración de hermanos en comunión,a estar preparados en la fe desde la penitencia, la caridad y la oración, a vivir como Iglesia universal que ora, se congrega y comparte su fe.También nos hace un llamado a no dejarnos intimidar por malas interpretaciones que nos llenan de miedo, destrucción y  terror, proponiendo un Dios bélico y destructivo del ser humano; somos conscientes que estamos en una sociedad alejada de Dios, una sociedad de indiferencia espiritual, pero tenemos la esperanza puesta en un Dios misericordioso que nos invita a seguir el camino del bien; teniendo claro que si nuestros actos son totalmente equivocados, las consecuencias que de ellos son destructivas y causan dolor.


Evangelio según San Lucas 19,1-10


En la reflexión del evangelio de hoy seguiremos paso a paso los acontecimientos vividos por Jesús y Zaqueo:
  • Jesús que va de camino: Es Jesús que camina con nosotros, es nuestra realidad, nuestro entorno, nuestra vida.
  • El hombre rico  quería conocerle: A pesar de tener poder económico, siente una necesidad espiritual, tiene la curiosidad de conocer a Jesús; dejando claro que lo económico no llena todo, que simplemente es una de tantas necesidades del ser humano.
  • De baja estatura: Es reconocer que por encima de nosotros está Dios, que el dinero no nos hace grandes.
  • Subir al árbol: Implica buscar los medios adecuados para poder ver a Jesús.
  • El imperativo de Jesús: “Baja enseguida, voy a hospedarme en tu casa”, Es la invitación que nos hace a bajarnos del orgullo, del odio, de la injusticia, del chisme, de la mentira etc.
  • Con alegría Zaqueo recibió a Jesús: Cuando el ser humano se ha “bajado del árbol” experimenta felicidad, paz, amor al encontrarse con Jesús.
  • Todos criticaban a Jesús al encontrarse con Zaqueo: En el mundo de hoy encontraremos personas que buscan criticar el bien que se hace.
  • La conversión de Zaqueo (pecado-restitución): El acontecimiento de la conversión de Zaqueo tiene todo un proceso: Hay un encuentro y un llamado, se produce una conversión, se aprende de la escuela del Maestro (discipulado), se puede vivir como hermanos en comunión (espiritualidad de comunión) y se puede ser misionero.


Viendo todo el caminar del Evangelio de hoy, nos encontramos con Jesús  que llega a nuestra vida a traernos la salvación, porque el Señor, siempre buscará al que está caído, lo tomará de su mano y lo llevará a vivir lo que es la auténtica felicidad.


Padre, cuénteme un cuento:



AMOR SIN MEDIDA
La historia de un niño que estuvo dispuesto a donarlo todo por salvar la vida de quien amaba…


Hace muchos años, cuando un médico trabajaba como voluntario en un Hospital de Stanford, conoció a una niñita llamada Liz quien sufría de una extraña enfermedad.
Su única oportunidad de recuperarse aparentemente, era una transfusión de sangre de su hermano de 5 años, quién había sobrevivido milagrosamente a la misma enfermedad y había desarrollado anticuerpos necesarios para combatir la enfermedad.
                                     
El doctor explicó la situación al hermano de la niña, y le preguntó si estaría dispuesto a darle su sangre a su hermana.
                
Por un momento, lo vio dudar antes de tomar un gran suspiro y decir; Si, lo haré, si eso salva a Liz.
Mientras la transfusión continuaba, él estaba acostado en una cama al lado de la de su hermana, y sonriente mientras los médicos lo asistían a él y a su hermana, veía retomar el color a las mejillas de la niña.
Entonces la cara del niño se puso pálida y su sonrisa desapareció. El miró al doctor y le preguntó con voz temblorosa: ¿A qué hora empezaré a morirme?
Siendo solo un niño, no había comprendido al doctor; el pensaba que le daría toda su sangre a su hermana... Y AÚNASÍI, SE LA DABA...


SINTONÍZATE CON DIOS:
  • Me reconozco amado por Dios y ofreceré de ese amor a mi familia.
  • Al acostarme y al comenzar el dia me reuno en familia y oro con ellos.
  • Dejaré mi orgullo y mi mal genio, teniendo presente que con mis actitudes maltrato a los que amo. 

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